El ritmo y la magnitud actuales del calentamiento global son excepcionales en comparación con la era preindustrial. Cada vez es más evidente que el cambio climático aumentará la duración e intensidad de los fenómenos extremos, con graves consecuencias para las personas, las economías y los ecosistemas naturales. Limitar el aumento de la temperatura global a 1,5 °C es fundamental para evitar los peores riesgos asociados con el calentamiento global. Como respuesta, es crucial investigar los posibles cambios futuros en variables climáticas como la temperatura y las precipitaciones, lo que debería suponer un importante reto para las partes interesadas en la gestión de riesgos catastróficos regionales, la prevención de impactos graves y el desarrollo de planes de adaptación.
Cada estación cuenta con equipos para medir el estado de la atmósfera y el suelo. Los instrumentos terrestres miden la velocidad y dirección del viento, la humedad, la temperatura del aire, la radiación solar y la precipitación. Miden la temperatura y la humedad del suelo a una profundidad específica.
Hora de publicación: 19 de enero de 2024